Ramiro Bueno es el único hijo del Potro Rodrigo, el cordobés que marcó una época a fines del siglo XXI en la cultura popular en Argentina.
El 24 de junio del año 2000, el cuartetero falleció a raíz de un accidente de tránsito. Desde ese día, se convirtió en uno de los músicos más recordados y queridos del país.