Lo anunció la empresa distribuidora de energía en su cuenta de Twitter y detalló que le retiraron el medidor a la compañía textil y de calzado ubicada en el barrio porteño de Saavedra.
"El robo de energía es equivalente a 123.000 kWh o la suma de $1.200.000", se precisó en el mensaje publicado en redes sociales.
Los aumentos en la tarifas golpean a todos y los locales son los que se hacen más eco de esto. En este marco es que algunos optan por una conexión clandestina para pagar menos o directamente no pagar el servicio.