En una entrevista con Gente, Sosa contó los problemas que sufre por el metacrilato que le inyectó: "Ahora estoy medicada para soportar los dolores. Aparece cuando estoy sentada, hago ejercicios o algo muscular. Yo era una mujer sana. Nunca creí que Aníbal podía hacerme mal. Hasta que consulté a la doctora Mónica Milito y me abrió los ojos".Por otro lado, Pamela explicó por qué lo defendía de las acusaciones cuando eran pareja: "Lo defendía porque él me obligaba. Muchos me juzgan y se quejan porque no lo denuncié antes. Les digo que me costó darme cuenta de que es un psicópata... Yo estaba enamorada. Ocho años estuve con él. Te envuelve, te encanta...".Conmovida, Sosa reveló: "Yo tuve un intento de suicidio cuando estaba con él. Me quise matar con la insulina: me puse muchísima, me quería ir... No quería vivir más. Bajé la escalera temblando. Él estaba conmigo en la cama. Y zafé porque empecé a comer dulces. En los últimos tiempos no lo soportaba. Recibía maltrato psicológico. Me hacía sentir un trapo de piso. Me decía que no valía nada si no estaba con él. En mi último cumpleaños que compartimos, en 2014, me levantó la mano. Nunca me había pegado. Discutimos y me dio una palmada. Me puse a llorar. No podía más...".