Hay que combatir la rutina y el encierro. Por eso, las chicas decidieron ponerle picante a la cena. Pero no recurrieron a especias, sino que le pusieron el cuerpo, literalmente, y decidieron cocinar en lencería.
Hay que combatir la rutina y el encierro. Por eso, las chicas decidieron ponerle picante a la cena. Pero no recurrieron a especias, sino que le pusieron el cuerpo, literalmente, y decidieron cocinar en lencería.