Primicias
Enorme gesto de amor

Luisa Albinoni presentó a Verónica, su hija del corazón

“Yo no adopté a ella, ella me adoptó a mí”, declaró la actriz de 63 años en su primera entrevista con Verónica, su hija de diez años. Leé todas sus declaraciones.
A24.com | []
por [] | 30 abr 2015, 18:40
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Luisa Albinoni brindó una nota a la revista Paparazzi junto a Verónica, su hija de 10 años, adoptada, pero que la ama como si la hubiese parido.

Hace un tiempo, la niña escribió la siguiente carta, que conmovió a la actriz de 63 años:

“Quiero que sepas que te amo, que sos lo más lindo que me pudo haber pasado. Siempre te voy a necesitar. Te amo porque me diste un hogar y una familia maravillosa, y agradezco a Dios porque me dio a vos. Te deseo muy feliz cumple, y que se cumplan todos tus deseos”.

La joven pasó a quinto grado de la escuela primaria y en muy poco tiempo tendrá su documento con apellido Albinoni. La actriz afirmó sobre los trámites de adopción: “Hemos hecho una adopción legal, y el juez ya entregó su sentencia y le dio mi apellido. Ahora falta la parte burocrática, los papeles, porque justo me agarró la feria judicial. Y mirá, todas las noches la nena duerme conmigo, aunque la terapeuta me dice que no. ¡Es que estamos aprovechando el tiempo! Miramos dibujitos, nos damos besos, jugamos a la batalla con almohadas… ¡Es hermoso!”.

¿Cuándo se sintió su madre?” Siempre me sentí su mamá, pero tenía mis dudas sobre si ella me iba a querer… En una adopción, vos no adoptás una criatura: la criatura también te adopta a vos. Y si no le gustás, le va a pedir al juez que no la mande con vos. Es así. Porque me ha pasado con su hermanito, que no quiso quedarse”.

“Fue terrible. Cuando no se quiso quedar, tuve la sensación de no poder rescatarlo. Yo perdí tres hijos. Tendría que tener un varón de casi 42 años: lo perdí a los 19, nació y falleció. Después perdí dos embarazos más. Y fracasar con el nene fue como perder otro hijo…”, relató muy angustiada.

Para cerrar, sentenció: “Soy una mamá muy hinchapelotas. Ya de por sí ser una mamá grande es un problema, y ser una mamá pública es otro. Y siempre fui sobreprotectora, guardabosque. Todo eso lo tengo”.