Crueldad animal

La condenable justificación de un hombre que le pegó cuatro tiros a su perra

Se trata de "Negrita", una rottweiler de solo dos años. El violento episodio ocurrió en Glew y se dio a conocer por un llamado al 911.
Negrita

"Negrita", la perra agredida, con sus cuidadores (Foto: gentileza Diario Szeta).

En un aberrante caso de maltrato animal, un individuo le pegó cuatro tiros a su perra luego de que esta le robara el almuerzo que había preparado. De forma increíble, el animal logró sobrevivir a la agresión.

El inquietante episodio tuvo lugar en Glew, según lo reportado por el portal DiarioConurbano.com, y se dio a conocer cuando una llamada al 911 alertó a las fuerzas policiales sobre la situación en la calle Entre Ríos al 100.

Al llegar a la vivienda, los agentes encontraron el portón del garaje entreabierto, y cerca de las rejas, yacía un canino de raza rottweiler ensangrentado en el suelo.

De la residencia emergió un individuo con un arma que afirmaba que el perro le había robado un "matambre", justificando así su acto de violencia. La rápida intervención de los oficiales resultó crucial para detener al sujeto, reducirlo y ponerle esposas.

Cómo terminó la perra tras recibir cuatro tiros

El canino, una hembra de tan solo dos años de edad llamada "Negrita", recibió atención por parte del equipo de Zoonosis de la municipalidad de Almirante Brown. Afortunadamente, se recupera tras haber sido sometido a una intervención quirúrgica.

“Estamos orgullosos de nuestro Centro Municipal de Sanidad Animal y Zoonosis que en este caso puso a resguardo a la perra ‘Negrita’, de dos años”, sostuvo el intendente Mariano Cascallares, que destacó el trabajo del equipo del municipio, según el sitio Diario Conurbano.

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En esa línea, aclaró que la perrita “se recupera satisfactoriamente con los cuidados de los profesionales”, al tiempo que elogió el trabajo de Zoonosis Brown, al que consideró “un verdadero ejemplo de sanidad animal para todo nuestro país”.

El agresor, un hombre de 51 años, portaba un revólver calibre 32 que fue confiscado por las autoridades. Enfrenta ahora cargos por "posesión ilegal de arma de fuego y maltrato animal" y quedó bajo la custodia de la UFI 4 de Lomas de Zamora, bajo la dirección del fiscal Leonardo Kaszewski.

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