"Tomo el subte todos los días para ir a la oficina. Podría comprarme un auto en ochenta mil cuotas y no lo hice. Decidí que no es el momento; cuando llegue Genaro voy a necesitar otras cosas más importantes.A mí no se me cae ningún anillo por tomar el subte", sostuvo la modelo y empresaria en declaraciones a la revista Shop & Co..Además dio detalles de su relación con Juan Pablo Ramognino y de la lucha que encararon para formar una familia: "Desde que nos conocimos, hace cuatro años, nuestra fantasía era ser papás. Pero me diagnosticaron endometriosis y miomas, lo cual imposibilitaba que me embarace".Y agregó: "Consulté con varios especialistas y me operé. Pero empecé a tener problemas de salud, una gran anemia y debía solucionarlo. El deseo del embarazo quedó relegado. Necesitaba sanarme. Encontré un especialista que volvió a operarme, y quedé embarazada; pero lo perdí, como cualquier mamá primeriza. Y a los seis meses, sin buscarlo, apareció Genaro. Y acá estamos".Lorena está viviendo un gran momento y espera con mucha ansiedad el parto preciado.