Enfocado todo desde el humor, es una suerte de desfile de situaciones presentadas como relatos, recuerdos y momentos reales que se suceden en el tiempo en que se desarrolla la acción. Todo empieza con una madre que no quiere cruzarse con su ex marido, por lo que abandona el cumpleaños de su hijo dejando a todos los niños sin control en manos de la recepcionista del lugar. Entonces llega el novio de la recepcionista con intenciones de declararse, pero se encuentra con su novia a punto de explotar. Desbordada, ella se descarga en una catarata de confesiones y le cuenta las cosas que ve y vive como testigo en ese ámbito de trabajo. Ése será el hilo conductor de la obra que, ante los recuerdos y las situaciones que se suceden con la llegada de los distintos padres y madres a buscar a sus hijos, van elevando la tensión alejando toda posibilidad de una declaración de amor. Esos relatos se transformarán en los sketchs representados por los actores, que hacen de padre, de madre y de los novios, caracterizados. Se intercalarán momentos del tiempo real en que transcurre el cumpleaños hasta que todo termina con la llegada de los abuelos del niño.El estreno en el CPM Multiescena porteño será el 7 de enero y la sala ya luce la marquesina del espectáculo. Mirala.